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Pele 3 ó 4 papas grandes, lávelas y séquelas.
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Apoye horizontalmente sobre una papa la cucharita
destinada a papas noisette.
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Presione bien, hundiéndola horizontalmente en la
papa. Una vez hundida, y siempre presionándola bien, haga rotar la cucharita en
forma circular hasta desprender la bolita de papa.
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A medida que las moldee, déjelas caer en una
cacerola con agua acidulada con limón, para que no se oscurezcan.
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Hiérvalas hasta que estén cocidas. Que no se
pasen.
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Sírvalas como guarnición.
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