martes, 28 de febrero de 2017

Guisote de lentejas



Un auténtico guiso

Un guiso no tenía olor a guiso si entre sus ingredientes no figuraba el “ramito compuesto”… ¿Compuesto de qué? ¡De todas las hierbas aromáticas que crecían en la huerta! Perejil… tomillo… albahaca… Y una infaltable hoja de laurel, arrancada a tiempo del árbol y secada a la sombra.

                                                                                                                Blanca Cotta


Guisote de lentejas
 
Tomate, marrón, panceta y chorizo colorado se suman en una preparación a la que se le agregan las lentejas. Todo se deja hervir muy despacio. Se sirve con pan aromatizado con ajo.
 
 
Ingredientes
 
Masa
 
Lentejas, ½ kg
Aceite, 1/3 de taza
Cebollas picadas, 2
Dientes de ajo machacados, 2
Marrón, 1
Zanahorias cortadas en rodajitas, 2
Laurel, 1 hoja
Panceta ahumada magra, ½ kg (cortada en tiritas)
Chorizos colorados, 2
Sal y pimienta, a gusto
Orégano, 1 cucharadita
Tomates picados, con todo su liquido, 2 latas
Conserva de tomates, 1 cucharadita panzona
Caldo de verduras, bien sazonado, cantidad necesaria
Pimentón, 1 cucharadita
 
Varios
 
Triángulos de pan, fritos y frotados con ajo, cantidad necesaria para adornar la cazuela
 
Preparación
 
  1. Remoje las lentejas en abundante agua fría desde la noche anterior. Cámbieles el agua y póngalas a hervir hasta que estén cocidas… (ojo… ¡porque en un descuido pueden convertirse en puré!...). Escúrralas y reserve. Aparte algunas para prepararlas en ensalada. ¿Sabe lo rico que quedan?
  2. Vierta en una cacerola grande el aceite y, cuando este caliente, rehogue en el las cebollas, el ajo, el marrón cortado en cuadraditos y las rodajitas de zanahoria. Acuérdese de partir antes los dientes de ajo y eliminar al “villano de la película” (léase: brote interno verde o blanco).
  3. Agregue en la cacerola el laurel y las tiritas de panceta. La panceta cortada en tiras puede reemplazarla por bastoncitos de jamón crudo. Y si es serrano… ¡mejor!
  4. Cuando la panceta este traslucida, agregue los tomates y los chorizos colorados cortados en rodajas gruesitas. También puede agregar los chorizos colorados cortados en cubitos.
  5. Mezcle con cuchara de madera y rehogue un par de minutos. Este tiempo bastara para que se integren todos los elementos que componen la salsa.
  6. Incorpore en la cacerola las lentejas pre-cocidas. Agregue suficiente caldo como para cubrir el nivel de las lentejas. Tenga en cuenta que las lentejas son muy “sedientas” y pronto le reclamaran mas bebida…
  7. Deje hervir despacito, con la cacerola destapada, hasta que el líquido se reduzca y se forme una salsita espesa. Si la preparación amenazara con secarse, agregue más caldo durante la cocción.
  8. Pruebe el guiso y sazónelo a gusto con sal, pimienta, el orégano y el pimentón previamente remojado en un poco de agua fría. Si el guisito de lentejas esta programado para combatir el frío, le sugiero que para condimentarlo use una mezcla de pimentón dulce y pimentón picante o ají molido.
  9. Agregue en la cacerola la conserva de tomates igualmente diluida en apenitas de agua. La conserva de tomates ayudara a espesar la salsa y concentrar su sabor.
  10. Deje hervir un par de minutos más y sirva el guisito bien caliente, adornando la cazuela – si lo desea – con triángulos de pan frito, aromatizados con ajo. Otra manera de enriquecer la presentación del guiso: guarnecer el borde de la cazuela con rodajas de papas fritas a la española, clavadas verticalmente y bien doraditas y crujientes.
 
 
 
Secreto I:
 
  • Verifique que las lentejas que compró no son precocidas. De ser así evite el remojo previo para no correr el riesgo de que el guiso se le convierta… ¡en puré! Debo confesar que esto me ocurrió una vez.
 
Secreto II:
 
  • Para alivianar el guiso, los chorizos colorados puede pincharlos y hervirlos previamente para eliminar el exceso de grasa. Recién entonces, cortarlos en rodajitas y agregarlos a la preparación.
 
 

domingo, 26 de febrero de 2017

Tarta de ricotta sin masa


A veces uno tiene ganas de hacer una tarta pero se frena ante la pereza de tener que amasar. Esta fórmula es tan simplísima que tan sólo tendrá que deshacer en miguitas 6 u 8 vainillas. El relleno no lo cubrimos para evitar que el polvo de vainillas lo seque demasiado.


1)      Deshaga en miguitas 8 vainillas.
2)      Vuélquelas en una tartera enmantecada y, con el revés de una cuchara, adhiéralas presionando contra el molde a fin de forrarlo en un espesor parejo.
3)      Aparte, mezcle un pote grande de ricotta con la ralladura de un limón grande, el jugo de dos, 3 yemas, ¾ de taza de azúcar y ½ taza de pasas de uva sin semillas.
4)      Una a lo anterior 3 claras batidas a nieve.
5)      Vuelque en un molde y cocine en horno suave, hasta que el relleno esté firme.
6)      Si desea, cuando se enfríe, decórele la superficie con un enrejado de Chantilly y mitades de cerezas al Marraschino (o lo que se le ocurra). Sírvala bien fría.



jueves, 23 de febrero de 2017

Cazuelitas a la inglesa



Para el Día del Padre... ¡bien valdrá la pena gastar y trabajar un poquito de más! Pero no se asuste: elegí una masa facilísima para armar este clásico de la cocina inglesa. Si a papi no le gusta la pechuga, podrá hacerlo con muslos deshuesados, cocidos y cortados en trocitos.




LO QUE LLEVAN
Lo que lleva la masa:

harina leudante UNA TAZA Y MEDIA Y EXTRA PARA ESPOLVOREAR
manteca fría 100 GRAMOS
sal MEDIA CUCHARADITA
queso crema MEDIA TAZA
leche CANTIDAD NECESARIA.


Lo que lleva el relleno:

supremas de pollo, sin piel ni indeseables, hervidas 3
jamón cocido 100 GRAMOS
champiñones 100 GRAMOS
morrón al natural UNA LATITA
arvejas UNA LATA
papas noisette, previamente hervidas UNA TAZA Y MEDIA
manteca 2 CUCHARADAS
harina 2 CUCHARADAS AL RAS
perejil picado UNA CUCHARADA
cebolla rallada UNA
salsa inglesa UNA CUCHARADITA
caldo de verduras 2 TAZAS
sal y pimienta A GUSTO.


PASO 1 (3 MINUTOS)

Ponga sobre la mesa la harina junto con la sal y la manteca cortada en trozos. Corte la manteca con dos cuchillos (o con el aparato especial) hasta convertir todo en un granulado como arena húmeda. Ponga el granulado en un bol y líguelo con el queso crema y la leche necesaria. Vuelque sobre la mesa enharinada, aplástelo dándole forma de bollo y estaciónelo en la heladera hasta el momento de utilizar.


PASO 2 (8 MINUTOS)
Corte la carne de pollo en dados parejos. Corte igualmente la tajada de jamón cocido, desechando previamente la grasa. Si los champiñones son grandes, pártalos por la mitad verticalmente. Escurra los morrones y córtelos en cuadraditos (reserve el líquido). Escurra las arvejas y distribuya en cada cazuelita una porción de los ingredientes enumerados y una de papitas noisettes. Reserve las cazuelitas.


PASO 3 (13 MINUTOS)
Derrita la manteca en una sartén. Mézclele la harina hasta obtener una pastita. Agréguele el perejil, la cebolla rallada, la salsa inglesa y el caldo (o si usó champiñones envasados, el líquido de los champiñones). Mezcle con batidor de alambre hasta dispersar los grumos. Siga revolviendo con cuchara de madera hasta que hierva y espese. Pruebe la preparación y sazone a gusto con sal y pimienta de molinillo.


PASO 4 (16 MINUTOS)
Distribuya esta salsa clara sobre los ingredientes que ya distribuyó en las cazuelitas. Reserve. Para lograr un efecto hojaldre en la masa, estire con palote de amasar el bollo que estacionó en la heladera en el paso uno. Espolvoree la masa estirada con harina y dóblela en tres. Hágala girar 90 grados y repita la operación de estirado y doblado. Vuelva a estirar la masa, espolvoree con harina y doble nuevamente en tres.


PASO 5 (26 MINUTOS)
Estire la masa dejándola fina. Recórtela en discos de un centímetro mayor que el diámetro de las cazuelitas donde distribuyó el guiso de pollo. Cubra el contenido de cada cazuelita con un disco de masa. Ingéniese para hacerles alrededor un repulgo, pellizcando los bordes. Haga tres tajitos en la superficie de cada pastel para que escape el vapor... ¡y al horno hasta que la masa esté bien doradita y crujiente!

miércoles, 22 de febrero de 2017

Torta Dobos






Especialidad húngara

Varias capas de masa esponjosa y una delicada crema de chocolate. El toque final: la cubierta de caramelo. ¡Irresistible!

Ingredientes

Masa

Yemas, 6
Azúcar, 250 gramos
Jugo de limón, 2 cucharadas
Harina, 100 gramos
Fécula de maíz, 50 gramos
Sal, un poquitito así
Claras a nieve, 6

Crema de chocolate

Chocolate, 150 gramos
Yemas, 4
Azúcar, 150 gramos
Crema de leche, 100 gramos
Manteca, 300 gramos
Café instantáneo, ½ cucharadita

Varios

Azúcar, 170 gramos
Nueces molidas, 200 gramos
Azúcar impalpable, cantidad necesaria
Tarteras desarmables de 24 ó 25 cm de diámetro, 2


1. Para la masa: bata las yemas con el azúcar y el jugo de limón hasta que estén espumosas.
2. Mézcleselas a la harina previamente tamizada con la fécula y la sal.
3. Únale las claras a nieve y mezcle con movimientos envolventes.
4. Enmanteque y enharine las dos tarteras y vierta en ellas una capa fin del batido.
5. Cocine estos discos de masa en horno caliente como si fuera a hacer piononos redondos.
6. Una vez cocidos pero no secos (3 ó 4 minutos) retírelos y desmóldelos sobre hojas de papel espolvoreadas con azúcar impalpable tamizada.
7. Cocine del mismo modo el resto del batido para obtener más discos.
8. Coloque un disco de masa sobre la mesa. Reserve.
9. Ponga los 170 gramos de azúcar (indicada en varios) en una sartencita. Mezcle sobre el fuego hasta que el azúcar se funda y tome el punto de un caramelo clarito.
10.                 Vierta el caramelo en el centro del disco de masa y extiéndalo rápidamente con una espátula antes de que el caramelo se endurezca.
11.                 Enmanteque una cuchilla y rápidamente trace sobre el caramelo tres o cuatro diámetros para marcar las porciones. Así será fácil luego cortar la torta. Reserve este disco aparte (será la superficie de la torta).
12.                 Para la crema: corte el chocolate en trocitos y derrítalos a bañomaría.
13.                 Agréguele las yemas previamente batidas con el azúcar y la crema.
14.                Siga revolviendo continuamente la mezcla a bañomaría hasta que espese pero sin que llegue a hervir. Retire y enfríe.
15.                 Bata la manteca con el café instantáneo hasta que esté bien cremosa.
16.                 Agréguele, de a poquito la crema de chocolate hecha anteriormente, batiendo muy bien luego de cada adición. Si la crema quedara muy blanda, colóquela un rato en el freezer hasta que tome consistencia para ser extendida.
17.                 Para el armado y terminación: arme la torta untando los discos de masa con 2/3 de la crema de chocolate y superponiéndolos (menos el de caramelo). Reserve un poquito de la crema (ya verá por qué).
18.                 Antes de untar el último disco, tome esta especie de alfajor gigante, úntele los costados con un poquito de la crema reservada y hágalo rodar por las nueces molidas.
19.                 Acomode la torta sobre la fuente donde va a servirla. Unte el último disco con el último resto de crema y corónela con el disco bañado en caramelo que reservó.
20.                 Mantenga la torta en la heladera hasta el momento de servirla.



Como muchas de las tortas de la repostería centroeuropea, la Dobos lleva el nombre de su inventor. Uno de los más renombrados pasteleros de fines del siglo XIX, el húngaro Jozsef C. Dobos, la creó a fines del 1800. La base de masa es similar a la del pionono y generalmente lleva de seis a siete capas o discos (la última cubierta con caramelo). Un año después de su creación, este clásico de la repostería húngara fue presentado en la National General Exhibition of Budapest donde tuvo gran aceptación. De ahí en adelante la fama de esta torta fue creciendo. Con la llegada de los inmigrantes húngaros a nuestro país, la receta comenzó a circular y pronto se convirtió en receta familiar.


Al disolver el chocolate recuerde que el calor excesivo puede arruinar su consistencia. Para evitar este inconveniente rállelo o córtelo en trocitos muy pequeños y cuide que el agua del bañomaría no esté muy caliente. Cada tanto retírelo del fuego y mézclelo suavemente para homogeneizarlo.


La Dobos es una torta delicada que requiere mucho cuidado en su preparación. Uno de los detalles más importantes es su cubierta de caramelo. La misma debe ser armada prolijamente para obtener una terminación impecable. Uno de los secretos para lograrlo es enmantecar ligeramente la espátula con la cual se esparcirá el caramelo sobre el disco de masa superior, para que el mismo no se pegue al metal. Otro detalle importante es no dejar pasar de punto el caramelo: debe estar apenas rubio porque si se oscurece se tornará muy quebradizo y será difícil trabajarlo. Para facilitar el corte de las porciones puede separar los sectores del disco de caramelo y ubicarlos en forma de molinete. Apoye cada sector sobre media nuez para darles una mejor presentación.


¡Gracias, Mabel!




martes, 21 de febrero de 2017

Supremas a la Kiev



Ingredientes

Supremas de pollo, 6
Manteca, 150g
Perejil picadísimo, 1 cda.
Sal y pimienta, a gusto
Jugo de limón, 2 cdas.
Harina, cantidad necesaria
Huevos batidos, 2
Manteca derretida, 1 cda.
Pan rallado, cantidad necesaria
Aceite, cantidad necesaria


Varios

Zanahorias a la Vichy
Arvejas escurridas y pasadas por manteca, 1 lata
Papas noisette fritas, 1/4 kg


Preparación

1. Lave y seque las supremas.
2. Aplástelas como si fuera a hacer milanesas.
3. Bata la manteca hasta que esté cremosa.
4. Incorpórele de a poco el jugo de limón y el perejil.
5. Sazónela a gusto con sal y pimienta negra.
6. Ponga en la heladera hasta que tome consistencia.
7. Divida la manteca en seis porciones y dé a cada una forma cilíndrica.
8. Apoye una porción de manteca en un extremo de cada suprema y envuélvalas, arrollando.
9. Reboce las supremas arrolladas con harina.
10. Báñelas en el huevo batido mezclado con la manteca derretida.
11. Rebócelas con el pan rallado.
12. Ponga las supremas en una fuente y estacione en la heladera una hora.
13. Caliente suficiente aceite en una sartén.
14. Fría las supremas a fuego medio para darles tiempo a que se cocinen bien las distintas capas del arrollado, dándolas vuelta una vez, hasta dorarlas de ambos lados. 
15. Escurra las supremas sobre papel absorbente y preséntelas en una fuente, rodeándolas con grupos alternados de zanahorias a la Vichy, arvejas a la manteca y papas noisette fritas.



¡Gracias, Susana!

domingo, 19 de febrero de 2017

Palmeritas






Un clásico de la merienda, con la más exquisita masa de hojaldre

Dentro de la gastronomía hay nombres que hacen temblar las rodillas de cualquier cocinera. Uno de ellos es la palabra hojaldre. Una masa deliciosa y crujiente que al cocinarse se abre en mil hojas (bueno, ¡bah!, es una forma de decir) y que lleva una cuidadosa y paciente elaboración, donde los dobleces tienen un rol fundamental.

Y aquí los interrogantes que se plantean las cocineras noveles: ¿Cómo se dobla en dos, en tres o en cuatro? ¿Cuántos grados hay que girar la masa después de cada doblez? Afortunadamente, en muchas casas de pasta o panaderías de confianza venden las planchas de hojaldre ya hecho. ¡Albricias! Que no se entere Antoine Carême, célebre cocinero francés. Su vocación por la cocina fue muy precoz. A los 17 años ya sorprendía por su fama de eximio repostero. Llegó a ser jefe de las cocinas de Talleyrand, de Jorge IV de Inglaterra, del emperador de Rusia y de otros personajes famosísimos.
A él se le atribuye la creación de la patê feuilleteé (masa de hojaldre), aunque los españoles insisten en que ya existía desde el año 1611 en su cocina. Lo cierto es que hoy nos animaremos a trabajar la dichosa masa. “Echate a volar y tendrás alas” (Richard Bach).

Palmeritas de hojaldre

1. La preparación

Compre una plancha de hojaldre (o decídase a hacerlo). Espolvoree la mesa con azúcar molida.

2. La masa

Estire la masa sobre el azúcar, dándole forma rectangular. Espolvoree la superficie con azúcar. Enróllela a partir de los dos extremos largos opuestos, para formar dos rollitos que se unan en el centro.

3. El corte y la cocción


Corte el “arrollado” en tajadas de 1 centímetro. Acomode las palmeritas sobre placas enmantecadas y cocine en horno caliente hasta que el hojaldre se abra. Delas vuelta y deje que se caramelicen del otro lado.


viernes, 17 de febrero de 2017

Torta de galletitas


Es de esas dulzuras que se aprenden una vez y se agendan para siempre. Una verdadera solución de la repostería casera. Se hace con galletitas de chocolate mojadas en oporto o leche chocolatada y un relleno de dulce de leche y queso crema. Van a pedir turno para probarla...



INGREDIENTES:

VINO OPORTO O LECHE CHOCOLATADA
400 GR DE QUESO CREMA, EL MENOS ÁCIDO DE PLAZA
1/4 KG DE DULCE DE LECHE
1/2 KG GALLETITAS SIMPLES DE CHOCOLATE, FINAS Y RECTANGULARES
1 CUCHARADITA DE ESENCIA DE VAINILLA

PROCEDIMIENTO: 

Vierta el oporto o la leche en una fuentecita onda y resérvelo allí. Mezcle en un bol el queso crema, el dulce de leche y la esencia de vainilla. Moje las galletitas en oporto o leche chocolatada y tapice con ellas el fondo de una fuente onda de 21 por 14 aprox.Cubra las galletitas con una capa de la crema de queso. Tape la crema con otra capa de galletitas mojadas. Unte las galletitas con una buena capa de crema de queso. Siga rellenando el molde con capas de galletitas y crema. Termine con una capa de crema. Decore la torta con nueces y déjela en la heladera hasta servir.


jueves, 16 de febrero de 2017

Platillos voladores


¿Quiere saber cómo hacer esas (galletitas) carísimas y engordantes? Todo el mundo esta empeñado en imitarlas, como si nosotras no hubiéramos hecho mas de una vez formulas así de ricas y así de diferentes… ¿¿Recuerda los platillos voladores que más de una vez me pidió su repetición? ¡Ahí van! ¡Atájelos!... Mezcle todo esto: 2 cucharadas de Kero, 2 yemas, ½ taza de azúcar negro, ½ taza de azúcar molido, 100 gramos de manteca, 1 taza de harina, 1 cucharadita de esencia de vainilla, 2 cucharaditas de polvo para hornear y 1 cucharadita (al ras) de bicarbonato de sodio. Vuelque sobre la mesa enharinada, estire fina, corte en discos de 5 cm de diámetro y póngalos en el horno hasta que estén doraditos (¡que no se le quemen!) y crujientes. Entibie, despéguelos y déjelos enfriar sobre una superficie lisa. Al enfriarse se endurecerán y harán ¡crack! ¿Resultado? ¡10 puntos!



domingo, 12 de febrero de 2017

Pancitos de queso



Coloque sobre la mesa 1 taza de harina leudante, hágale un hueco y ponga allí 1 taza de queso rallado, ½ cucharadita de sal y 50g de manteca fría. Corte la manteca hasta obtener un granulado. Ponga en un bol. Mezcle con un tenedor y súmele 4 chorros de soda. Vuelque sobre la mesa enharinada y forme un bollo. Tome pequeñas porciones, haga pancitos, colóquelos sobre una placa y hágales 2 tajitos superficiales. Cocínelos en horno caliente.


sábado, 11 de febrero de 2017

Arroz "graneado"




Se usa mucho como guarnición y se llama así al arroz cocido cuyos granos quedan sueltos y no apelmazados. El secreto para lograrlo así es poner, por ejemplo, 1 taza de arroz en un colador y lavarlo bajo el chorro de la canilla hasta que el agua salga transparente, señal de que se le ha desprendido todo el almidón. Luego, cocinarlo por hervido y, una vez a punto, colarlo y volverlo a “refrescar”, puesto en un colador, bajo el chorro de la canilla de agua fría… ¿Ensayamos preparando con él alguna rica ensalada?