1. Cada vez que uno vuelve de vacaciones (haya ido adonde haya ido y se fabriquen alfajores o no en ese lugar), todo el mundo espera ansioso con las manos abiertas.
2. Somos conscientes de lo importante que es ahorrar; no podemos invertir un dineral en comprar, además, alfajores para todos.
3. Entonces, te proponemos algo muy sencillo y rico: fabricar… ¡alfajores de pan!
4. Compra un pan lácteo de soja (u otro pan lácteo que tenga sabor dulzón), un pote de dulce de leche espeso y una tableta de chocolate cobertura.
5. Elige un cortapastas chico (puede ser un tubo vacío, una tapita, etc.) y recorta la miga del pan en discos. Si no usas pan de soja, salpica cada disco con unas gotitas de esencia de vainilla. ¿Listo? Coloca las tajadas en placas de horno y déjalas a fuego suave hasta que estén sequitas y apenas pálidas. Déjalas enfriar.
6. Entonces corta el chocolate cobertura en trocitos y apoya el recipiente en una cacerolita que contenga agua hirviendo (¡prohibido quemarse!). Revuelve hasta que se derrita. Finalmente, une las tapitas de pan de a dos colocándoles dulce de leche en el medio y, una vez armadas, ingéniate con una cuchara para bañarlas con el chocolate cobertura disuelto. Apóyalas sobre un papel impermeable y ponlas en la heladera hasta que el chocolate esté durito. Para regalar estos alfajores, puedes envolverlos en papel metalizado y escribir bien claro (con fibra, para que se note mejor): made in casa!
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