Me convidó con una “salsita de anchoas” especialmente “robada” para mí! Te lo agradezco muchísimo y la publico sin culpa. Rehogue una cebolla picadísima en un pocillo de aceite (tamaño café) y agréguele luego 8 filetes de anchoas en aceite, escurridos y picaditos, 1 pocillo (de igual tamaño) de vino blanco seco, 2 cucharadas de vinagre, 1 cucharada de perejil picadísimo y 3 huevos duros… ¡ufa! también picaditos. Revuelva sobre el fuego unos segundos, sazone a gusto con pimienta y sirva fría o caliente para enriquecer la lista de salsas de una Bourguignone… ¡o para prestigiar a una merluza con aspiraciones de lenguado!
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