- Convénzase (convenza a su hígado) de que no hay nada más lindo que encontrar cada día (o cada mes o cada año) un buen pretexto para brindar. “Una onza de alegría vale una libra de tristeza” (Baxter).
- Ponga en el vaso mezclador 4 cubitos de hielo, 2 cucharaditas de azúcar molida, 2 cucharaditas de jugo de limón (si encuentra “limón sutil”, mejor), 2 cucharaditas de jugo de cerezas al Marrasquino y 2 medidas de ron blanco.
- Revuelva hasta que el vaso se empañe.
- Ponga en dos copitas para cóctel un par de cerezas al Marrasquino y cuele sobre ellas el cóctel.
- Brinde con todas sus ganas, apostando siempre a la vida. “La dicha de la vida consiste en tener siempre algo que hacer, alguien a quien amar y alguna cosa que esperar” (Chalmers). ¡Adianchi, Argentina! (Olmedo).
Páginas
▼
No hay comentarios:
Publicar un comentario